por Robin D. Laws
A medida que han ido apareciendo más secuencias de El rey de Amarillo, has ido viendo más cartas de Heridas y Conmoción de un solo uso con sus detalles específicos.
Estas pueden referirse a las entidades que las descartan. O pueden requerir que los personajes interactúen con los detalles del misterio para descartarlas.
Prepárate con antelación para los escenarios que crees creando cartas específicas para cada uno.
Por ejemplo, en mi prueba de juego de la secuencia La Nueva Normalidad, un enemigo del libro, los tronquitos (pág. 60), tenía cartas de Heridas diferentes a las que aparecen en el libro. Los tronquitos son esbirros irritantemente aterradores hechos de papel maché animado. Con su grito de «¡tronquito, tronquito, tronquito!», acosan a los enemigos de sus amos, infundiendo inquietud e informando al cuartel general con sentidos sobrenaturales.
En nuestra serie, servían a un político que se beneficiaba de la alteración de la realidad carcosiana. Para cuando los investigadores descubrieron esto, varios investigadores llevaban en sus muñecas otro aspecto de su conspiración: un siniestro dispositivo similar a un Fitbit llamado Erizo. En el libro de juego, las cartas de Herida que reparten en combate deben adaptarse a cualquier situación en la que los DJ puedan usarlas. En mi mesa, podrían aprovechar este otro elemento de la trama, así:
Senos obstruidos
Herida
No letal. -1 a todas las pruebas.
Se descarta al fallar una tirada por un margen de 1.
El efecto tronquito
Herida
-1 a las tiradas de concentración y presencia si algún personaje de la escena actual ha expresado una opinión con la que el amo de los tronquitos estaría de acuerdo.
Se descarta al liberarse de un Erizo.
Senos obstruidos refleja lo que sucede cuando luchas contra un enemigo de papel maché: se convierte en polvo incluso si te vence, creando una nube de polvo inusual que literalmente te llega a la nariz.
El efecto tronquito es un ejemplo peculiar de una herida que tiene un coste psíquico. Los acontecimientos del juego ya habían establecido los extraordinarios esfuerzos que los personajes debían hacer para quitarse a los Erizos de encima. Peor aún, si recibes esta carta y no tienes un Erizo encima, tienes que adquirir uno, ponértelo, exponiéndote a sus diversos efectos nocivos, y luego quitártelo de nuevo para descartar la carta.
O puedes esperar hasta el final del escenario y descartarla entonces, ya que no es una carta de Continuidad.
Vincular cartas a fuentes de miedo constantes en tu partida les da un escalofrío extra. Los horribles gritos de los zorros se convirtieron en un tema recurrente en mi partida. Ahora que lo recuerdo, me pregunto por qué no los incorporé en un efecto de carta. Tantas maneras de desconcertar al grupo, tan poco tiempo…
Al vincular una condición de descarte a eventos específicos de la historia, asegúrate de que la condición se pueda cumplir. Quieres que el jugador que tenga la carta se sienta presionado, pero no completamente forzado, a intentarlo. Céntrate en acciones arriesgadas o difíciles de lograr, pero que podrían querer realizar incluso sin la carta. En este ejemplo, deshacerse de un Erizo es algo positivo en sí mismo.
Los jugadores simplemente se resignan al riesgo de quedarse con una carta, y a sus consecuencias negativas, si le añades una condición de descarte demasiado desagradable o desafiante. Una carta que les da la opción de, por ejemplo, matar a un PNJ inocente en particular, se siente demasiado forzada.
Aquí tienes una versión injustamente manipuladora de una carta personalizada:
Pensamientos asesinos
Conmoción
-2 a las pruebas de Concentración.
Descarta matando a la dulce Sally Murdoch.
El miedo a volverse malvado es un clásico del terror y está dentro de los límites, pero tu carta personalizada debería invocarlo sin confundir al jugador. En su lugar, podrías considerar una opción para el personaje que, aunque esté mareado, pueda recuperarse:
Pensamientos asesinos
Conmoción
-2 a las pruebas de Concentración.
Descarta confesando tus impulsos homicidas indeseados a un terapeuta, una figura de autoridad o a la propia Sally Murdoch.
Al usar efectos de descarte para impulsar a los jugadores a avanzar en la historia, formula la condición de forma vaga. Esto permite que los jugadores piensen que han resuelto un problema ingeniosamente. Las descripciones demasiado claras corren el riesgo de dar la sensación de que los jugadores deben improvisar para llegar a una escena cinemática predeterminada. Quizás podrías incluir un par de escenas que cumplan las condiciones.
Por ejemplo:
Enjaulado
Conmoción
Pierdes 1 de Salud y 1 de Estabilidad a las 6:00 a. m. cada día (hora mundial).
Descarta al escapar, llevándote contigo a un prisionero condenado injustamente.
Esta versión puede parecer demasiado restrictiva:
Enjaulado
Conmoción
Pierdes 1 de Salud y 1 de Estabilidad a las 6:00 a. m. cada día (hora mundial).
Descarta al escapar, llevándote a Albert Chen contigo.
O podría funcionar bien, especialmente si los jugadores ya están pensando en rescatar a Albert cuando aparezca la carta. De esta manera, el descarte se registra como un incentivo adicional para un objetivo existente, no como un obstáculo que superar a regañadientes.
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